Una pistola para pintar es una de las mejores herramientas para renovar tu hogar. Este dispositivo permite obtener un acabado profesional de manera sencilla y rápida. Puedes utilizarlas para cubrir múltiples superficies con diferentes pinturas e incluso otros materiales, como esmaltes, barnices y selladores.

Su creciente uso deriva de sus características y las ventajas que ofrece, incluyendo un fácil manejo que permite que casi cualquier persona pueda utilizarla. Si buscas la herramienta adecuada, ¡sigue leyendo! Compartimos contigo todo lo que debes saber para elegirla y aprender a usarla como un experto

Qué hace una pistola para pintar

Comencemos por lo básico: ¿qué son las pistolas para pintar? Quizá ya has visto algunas y, como te has dado cuenta, son dispositivos que funcionan a modo de aspersores, que sirven para esparcir pintura y otros líquidos (barnices, selladores y hasta sanitizantes) sobre diversas superficies. Esto las convierte en una herramienta indispensable para los hogares.

Pero vayamos más allá. La función de las pistolas es pulverizar los materiales y expulsarlos de forma controlada para cubrir los espacios deseados. Aunque hay algunas diferencias entre modelos, sus partes principales son:

  • Cuerpo: estructura central de la pistola.
  • Recipiente o depósito: sitio donde se almacena la pintura.
  • Empuñadura: parte por donde se sujeta la pistola.
  • Gatillo: pieza que activa la salida de pintura.
  • Boquilla: pieza por donde sale la pintura.
  • Reguladores: para manejar la fuerza y cantidad de pintura que sale.
  • Interruptor: para prenderla y apagarla.

Además, algunas pueden incluir otros accesorios que te facilitarán aún más el proceso, como una luz led para afinar detalles en espacio oscuros, o un viscosímetro, para que antes de comenzar puedas revisar que la pintura tenga la consistencia adecuada. Todo dependerá del modelo.

Tipos de pistolas para pintar

Debes saber que existen diversos tipos de pistolas para pintar. Una forma de diferenciarlas es por la ubicación del depósito, que implica un cambio en el procedimiento que usan para movilizar la pintura del recipiente a la boquilla:

Pistola de Succión

Tiene el depósito debajo de la pistola. La pintura sale a través de un método de succión. Es un modelo recomendado para pinturas ligeras.

Pistola para pintar de succión .

Pistola de Gravedad

Tiene el depósito en la parte superior de la pistola. La pintura se esparce gracias a la gravedad, el peso y la viscosidad. Se usan para pinturas pesadas.

Pistola para pintar de gravedad.

Por otro lado se puede diferenciar entre:

Pistola de aire comprimido

Se conecta a un compresor, que toma el aire en la estancia, lo comprime y lo manda a la pistola de pintura a través de una manguera. Dicha presión es menor que en el caso de las pistolas de gravedad

Pistola eléctrica

Una bomba eléctrica se encarga de que salga la pintura, al extraerla desde el depósito a una presión alta que permite que pase por el regulador y se esparza. Se puede usar con una gran variedad de pinturas

Uno de los modelos más modernos es la pistola eléctrica. Es ligera, de fácil manejo y una de las mejores opciones para tener en el hogar. Por eso, nos enfocaremos en este tipo de herramienta de aquí en adelante.

Ventajas de usar una pistola eléctrica

Las pistolas eléctricas para pintar tienen diversas ventajas a la hora de renovar tu hogar. Si quieres una, pero aún no te has decidido, ¡no te preocupes! A continuación mencionamos algunos beneficios que podrán ayudarte a tomar una decisión.

Con una pistola para pintar puedes cubrir casi cualquier tipo de pintura.

Alta versatilidad

Primero, con una pistola rociadora puedes cubrir casi cualquier tipo de superficie, incluyendo cemento, yeso, piedra, madera, metal, cerámica, porcelana, textil, plástico, etcétera.

Esta herramienta incluso pinta en superficies irregulares o rugosas. Es decir, podrás usarla en paredes, muebles y otros objetos.

Lo anterior es gracias a que está hecha para utilizarse con diversos líquidos o materiales, como:

  • Pintura a base de agua
  • Pintura a base de aceite
  • Pintura plástica y de látex
  • Barniz
  • Esmalte
  • Sellador
  • Sanitizantes
  • Desinfectantes

¿Te imaginas las posibilidades? Puedes usarla para más de una tarea, ahorrando el dinero que podrías gastar en otras herramientas.

Pero no olvides revisar las excepciones, algunas no funcionan con pinturas texturizadas o para vehículos.

Manejo fácil, rápido y eficiente

Pintar a mano es una actividad que consume mucho tiempo, te deja agotado y en ocasiones requiere del trabajo de más de una persona. Con una pistola puedes pintar las paredes de una habitación en cuestión de horas y de una forma más cómoda, sobre todo si eliges una pequeña y ligera.

Podrás remodelar tu hogar y ahorrar tiempo con una herramienta sencilla de utilizar. Debes saber que no necesitas experiencia previa ni capacitación para utilizarla como todo un experto. Más adelante hablaremos de ello.

Usándola de forma correcta podrás ahorrar material y mantener una mayor limpieza a la hora de pintar, ya que evitarás derrames y salpicaduras. Además, podrás olvidarte de los molestos goteos y de las pelusas o pelos de brocha pegados a la pared.

Finalmente, su durabilidad es elevada. No tendrás que reemplazar tu pistola para pintar tan rápido, como sucede con los rodillos o brochas. Para alargar su vida útil, solamente necesitarás cuidarla de forma adecuada y darle mantenimiento.

Cobertura total

Por otro lado, cuando trabajas con una pistola para pintar la cobertura de las superficies es total, ya que puedes aplicar la pintura de manera uniforme, logrando un acabado profesional y homogéneo.

Además, si utilizas esta herramienta no quedará ni un centímetro sin pintar. Podrás cubrir desde esquinas y pequeños detalles hasta grandes espacios.

Algunos modelos tienen diversas modalidades de rociado, incluyendo uno de precisión, lo que te permite utilizarlas en objetos pequeños o áreas de difícil acceso. Las que tienen alguna luz led incluso te permitirán trabajar en rincones oscuros.

Puedes configurarla de acuerdo con tus necesidades y los acabados que quieras lograr.

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Usa tu pistola para pintar como un experto

Si lo que te preocupa es que sea una herramienta difícil de usar o no puedas lograr una aplicación profesional, ¡tranquilo! Aunque existen pistolas industriales y pensadas en talleres profesionales, muchas otras están hechas para su uso en el hogar. Es decir, tienen un manejo sencillo, pero pueden lograr la misma calidad en acabados.

Para utilizar una pistola rociadora de uso casero solamente debes seguir algunos pasos y conocer las recomendaciones de seguridad. Una vez que los conozcas y practiques, podrás pintar como un experto.

La pistola para pintar es una herramienta fácil de utilizar.

Conoce el paso a paso

Comenzar a pintar con una pistola rociadora no tiene que ser una ardua labor. Si sigues las recomendaciones generales que señalamos en este apartado, podrás pintar una habitación o todo una casa por ti mismo.

Prepara el material

Si usarás barnices, colorantes, aceites, impregnantes para madera, desinfectantes, sanitizantes o productos fitosanitarios, no necesitas preparar tus líquidos. Así que puedes pasar al siguiente paso sin preocupaciones.

Pero, si vas a utilizar pintura de agua o aceite, esmaltes, lacas de color o imprimaciones, primero debes verificar la viscosidad de tus materiales. ¿A qué nos referimos? La viscosidad de un líquido es una medida que refleja su espesor. Es vital controlarla para poder aplicar los materiales de manera adecuada y sin problemas.

Antes de comenzar a pintar debes asegurarte de que la pintura y cualquier otro material está bien diluido; si no lo está, necesitarás agregar un diluyente (de agua o de aceite) para llegar a la consistencia adecuada. Esto permitirá que el material pase por la pistola rociadora fácilmente.

¡Calma! Algunas pistolas incluyen un viscosímetro sencillo. Solamente debes sumergirlo en el material, llenarlo y esperar a ver cuánto tiempo tarda en vaciarse. Lo ideal es que tarde entre 25 y 50 segundos. Siempre consulta las instrucciones de los líquidos que usarás y de la pistola para pintar.

Llena y ajusta

Una vez que tienes tu material listo, llega el momento de preparar la pistola rociadora. Primero hay que llenarla: hazlo lentamente y con cuidado, no querrás desperdiciar pintura.

Asegúrate de enroscar bien el recipiente al cuerpo de la herramienta y de alinear el tubo de succión en la dirección adecuada: hacia enfrente si vas a rociar hacia abajo o hacia atrás si vas a rociar hacia arriba.

Después, ajusta opciones como el patrón de rocío y la intensidad. Las pistolas tienen diversos sistemas que permiten moderar el flujo de pintura o líquido que deseas que salga por la boquilla.

Comienza a pintar 

El primer paso es practicar rociando una superficie de cartón, un trozo de madera o algún objeto que no temas estropear. No sólo debes hacerlo si es la primera vez que utilizas una pistola rociadora, también cuando quieras ajustar la fuerza y cantidad de material a rociar o para cargar el gatillo antes de comenzar a pintar.

Ahora bien, los pasos siguientes son sencillos e indispensables para obtener un acabado uniforme y completo:

    1. Sostén la pistola en posición vertical, a una distancia de 25 a 30 cm y de manera paralela al área que deseas cubrir.
    2. Aprieta el gatillo.
    3. Mueve la pistola de arriba hacia abajo o de un lado a otro, dependiendo el patrón de rociado de tu pistola.
    4. Después de haber hecho el primer trazo, debes sobreponer el siguiente 4 o 5 cm encima del anterior.
    5. Siempre rocía el borde del área deseada.

Recuerda mantener tu muñeca recta y en paralelo con la superficie. Si doblas tu mano o brazo podrías modificar el ángulo de rociado y crear una plasta de pintura, lo que provocaría un acabado irregular.

Tampoco olvides que debes evitar las superficies que exijan inclinar la pistola en un ángulo mayor a 45º. Esto, porque puede dañarse el rociador. Por esto, para pintar techos puedes hacer dupla con un rodillo.

Limpieza adecuada

Una vez que termines, debes limpiar tu pistola para pintar. Este es un paso sencillo y obligatorio para que el rociador funcione de manera adecuada.

Lo más importante es no hacerlo con solventes inflamables ni con diluyentes o lubricantes que contengan silicón; tampoco con blanqueador o cloro. Siempre debe hacerse con el diluyente (de agua o de aceite) correspondiente al material que utilizas. Puedes usar agua tibia y jabón o alcohol, por ejemplo.

También debes saber que hay dos cosas que están prohibidas: por un lado, nunca debes sumergir en agua tu pistola rociadora, mejor limpia cada pieza por separado y con poco líquido; por el otro, no debes limpiar la boquilla con objetos de metal afilados.

El mejor lugar para hacerlo es en un área al aire libre, o bien, ventilada y sin vapores inflamables. Una vez que termines, vuelve a montar las piezas y guárdala en un lugar seguro, donde no se caiga, aplaste o esté expuesta a la intemperie.

Otros consejos

Además, hay otros pasos que se aconseja seguir para obtener los mejores resultados:

    • Debes utilizar ropa protectora y proteger tus ojos y oídos. Puedes usar una mascarilla protectora, calzado antiderrapante, guantes y tapones para oídos. No utilices ropa muy suelta ni joyería.
    • Aunque la pistola puede evitar derrames y salpicaduras, debes cubrir y proteger todas las áreas que no quieres que se pinten para evitar accidentes.
    • Asegúrate de que el área de trabajo tenga buena ventilación y un espacio adecuado.
    • Debes limpiar todas las superficies y objetos antes de rociarlos.
    • Mezcla bien el líquido y verifica que no tenga grumos que puedan obstruir la pistola.
    • En el caso de usar pintura, se aconseja arreglar humedad y grietas, así como sellar las paredes primero. Además, debes cubrir las superficies con al menos dos capas.

Recomendaciones de seguridad

Aunque el funcionamiento de una pistola rociadora es sencillo, debes seguir al pie de la letra las indicaciones de uso y conocer las recomendaciones de seguridad:

    • Asegúrate de que la pistola esté apagada antes de conectarla a la electricidad, levantarla o desplazarla.
    • Da mantenimiento a tu pistola y revisa su funcionamiento antes de usarla.
    • No rocíes en exteriores en días lluviosos o con mucho viento.
    • Mantén siempre los pies apoyados en el suelo y no te estires demasiado. Si lo necesitas, utiliza una escalera.
    • Nunca apuntes o rocíes hacia tu cuerpo, el de otras personas o animales.
    • No permitas que la utilice un niño sin la supervisión de un adulto responsable.

Protege tu rostro y manos antes de comenzar.

Elige la pistola para pintar adecuada

Ahora que conoces cómo funciona una pistola para pintar, sus características y los pasos que debes seguir para utilizarla, tienes la información necesaria para elegir la herramienta adecuada para renovar tu hogar. Para cerrar, destaquemos algunos puntos importantes.

Si quieres que cualquiera en casa pueda utilizarla, las pistolas rociadoras de uso casero son la opción, ya que son ligeras y sencillas de usar, sobre todo si son un modelo eléctrico.

Verifica con qué pinturas puedes utilizarla y fíjate si tiene opciones para moderar el flujo de los líquidos, como el patrón de rocío y los controles de intensidad. Si trae accesorios extra será un plus. Así podrás cubrir las superficies más fácil y rápido.

Finalmente, lo mejor es adquirir tu pistola en una tienda oficial o en sitios como Mercado Libre y Amazon, pero siempre con el fabricante o distribuidor autorizado. Esto evitará que pases malos ratos.


REFERENCIAS

  1. Manual de instrucciones Paint Blast Pro.
  2. Manual de instrucciones Paint Blast Dual Action.